Entradas populares

viernes, 8 de octubre de 2010

Rebelión

Rebelión

Jaime Bateman Cayon un profeta de la paz, luchador inacansable, enamorado del mar.

Radio del Sur :: Para escuchar los latidos de la patria grande

Radio del Sur :: Para escuchar los latidos de la patria grande

Jaime Bateman Cayon un profeta de la paz, luchador inacansable, enamorado del mar.

SER GOBIERNO


Jaime Bateman Cayon un profeta de la paz, luchador inacansable, enamorado del mar.


SER GOBIERNOde Manuel Meco, el El Viernes, 08 de octubre de 2010 a las 11:08





"El paso decisivo que se da ahora nos compromete a todos. La decisión de ponernos como objetivo la disputa y la consecución de un gobierno, no ha sido la tarea rutinaria de siempre. No se trata de continuar la lucha, no se trata de ir a hacer más de lo que se hacía. Significa una decisión política, ideológica, organizativa, procedimental. Si el objetivo no está delimitado en concreto, las respuestas que le vamos a dar a los sectores de masas van a estar sectorizadas y las respuestas de las masas tienen que estar en función de ese objetivo; la política de alianzas políticas, procedimentales, sociales, morales, intelectuales, culturales, también.



Tenemos que despertar en nuestros sectores inmediatos la convicción de que podemos ser gobierno – y no ser poder, que es otra cosa- y que solamente se desarrolla un movimiento democrático, aquí y ahora, golpeando a las fuerzas antidemocráticas. Solo así se logrará cambiar la concepción en la gente, de que le democracia es el derecho a elegir y ser elegido. No. La democracia que queremos construir se genera desde otro tipo de ámbitos que son el de la participación y la toma de decisiones desde abajo.



Entonces no se trata de cualquier lucha de masas, no se trata de cualquier tropel, ni de cualquier organización militar. Se trata de una organización política capaz de conducir el proceso de reconstrucción de la democracia en nuestro país desde abajo, en una confrontación con las fuerzas oscuras de la dictadura; permanente, constante, contundente para que nuestra propuesta democrática

sea lo permanente, lo constante, lo contundente que requiere la Nación.



Por eso tenemos que consolidar y desarrollar una fuerza política y procedimental adecuada al tamaño de la propuesta política, y toda nuestra actividad y nuestras respuestas tienen que ser en función de eso. Con ese objetivo claro, nos podemos lanzar a todas las tareas: ir al Vaticano o ir al Sindicato, hacer literatura, hacer logística, sacar el periódico, hacer cine, ir a la lucha de masas, consolidar

milicias... lo que sea. Porque todas las demás actividades que realicemos, asegurando que el eje funciona, son afluentes a ese ritmo fundamental. Sin esa convicción, no podemos pensar en la victoria y entraremos a engrosar las largas listas de “grupúsculos revolucionarios” que han pasado por la historia de Colombia. Y no se trata de combinar todas las formas de lucha. No. Se trata del fortalecimiento de un núcleo, de una propuesta y de un instrumento de acción, en función del cual giren las otras fuerzas; desde la cual fluyan propuestas, actitudes, valores, para todo el mundo y al nivel de todo el mundo, hechos desde la fuerza y la audacia, hechos desde la seguridad del desarrollo en la acción. Nos van a creer cuando mostremos que tenemos fuerza y nos van a creer cuando les demostremos que se va venciendo en la lucha y en función de ese objetivo.



Tenemos que desarrollar una actitud que nos permita ser capaces de entender este país como es, y la manera de aceptar un país es combatir como al país le gusta; es hacer lo que el país quiere, hacer salir las fuerzas morales que el país tiene, y es introducir un ideario nacionalista y revolucionario, el cual, conjugado con los valores del pueblo, nos dan la esencia del M-19. En función de ese objetivo,

de esa decisión política, nosotros podemos deducir qué tipo de acciones son acordes para fortalecer su cumplimiento, cómo las convertimos en instrumentos de lucha y alianzas. Toda tarea es necesaria - la que sea- si está ligada al ritmo, a las necesidades y a la visión de una función estratégica de la fuerza fundamental, y de la lucha fundamental.



La realidad nos ha dado las mejores respuestas. Asumamos simplemente con toda la seriedad y toda la madurez, con todo el realismo imaginativo, la tarea de construir y ligar todas esas verdades dispersas, todas esas voluntades, en una fuerza única con desarrollo político y de acción: con tal capacidad de atraer amigos, de aislar enemigos; que cada amigo, que cada sector social se dé su propia respuesta democrática en su propia lucha y se sienta ligado a los demás. Si algo está claro en la historia del M-19 es que lo que nos proponemos hacer, se hace. Y los hombres y mujeres se transforman en esa lucha, se templan en la lucha y se elevan por encima de sí mismos en esa lucha.




Aceptemos entonces lo que nos pide la situación, pensemos a la altura, con grandeza. Metámonos. Sintámonos todos líderes de una


Nueva Nación. En concreto es eso: asumamos todos ser líderes, decidámonos. Al resto, le ponemos imaginación, consultamos con el pueblo, consultemos con la realidad y transformémosla. Pero ya no se trata de soñar ni de ser demagógicos, ahora se trata de construir, se trata de vencer a un enemigo que está ahí y que da pasos de animal grande, de un enemigo que no es fácil.






Esto no va a ser un paseo pero va a ser una fiesta grande, una fiesta de todos y para eso, la democracia necesita un nuevo ejército

para que el pueblo sea gobierno. Hoy es el momento de ser gobierno en este país. De ahí en adelante, todos los sueños, todas las luchas, todas las canciones, los paros, los tropeles. Decidido esto, entonces empezaremos a manejar la realidad en concreto: fuerzas


tácticas, momentos, situaciones y ritmos, días y meses, dinero, periódicos, murales, fiestas, banderas, movilizaciones, asambleas, todo.

La propuesta de Ser Gobierno hoy ya no es propuesta, ¡OJO!, es una Decisión... y eso es distinto. Las propuestas se lanzan y están para la discusión, se toman o se dejan. Las decisiones se asumen y se ejecutan porque son un mandato. Y la decisión y el mandato de las fuerzas políticas, sociales y económicas que conforman el nuevo bloque histórico de mayorías por la Democracia es uno muy

claro:




SER GOBIERNO"



Cdte. ALVARO FAYAD DELGADO